Jackson Guitar

domingo, 26 de octubre de 2014

Poema a una guitarra

Un velo azul, fruto del cielo, adornaba su espalda,
posada en sus manos residía una guitarra.

Deleitaba a sus oídos con melodías bizarras
acuñadas por el virtuosismo de personas pasadas.

Su mirada calmada centraba en los trastes,
el mástil lo recorría con sus dedos hábiles.

No deja nota abandonada en su actividad,
durante el trayecto de una canción su corazón hace vibrar.

Transmita amor o dolor, sea acuñada en roble o en pobre chatarra,
he aquí la magia de quien deja enamorarse por una guitarra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario